Un día iba a preguntar. Ella tenía miedo que ese día llegue. Cómo se lo diría. Cómo le explicaría las cosas. Cuál podría ser su reacción. Cuál sería la solución. Después de todo no hubiera querido que lo odie, pero esas cosas son inevitables. El odio tendrá que venir a su inmaculado corazón, por primera vez la tristeza se consumará en lágrimas mientras que sus puños expresarán el odio inminente y destructivo que estaba dispuesto a aceptar. Nos enseñan que tener rencor y odio es malo, y no quiero justificarlos , pero ella sufrió por decisiones que no había tomado, pago por deudas que no eran suyas y lo peor de todo es que el pequeño las pagará también. Cuántas cosas dejó de lado. Seguramente hubiera sido un mejor jugador de fútbol, hubiera sabido de deporte en teoría y práctica. Hubiera conocido cada marca de autos y no hubiera tenido dificultad de darle la mano a aquella pequeña en el parque. Él hubiera hecho su vida completa. Pero se negó. Ahora el pequeño se acerca a la hermosa y ...